Sé que no soy la primera ni la última
que escribe sobre el llamado “gran acotencimiento del año”, es
decir, el I Encuentro de madres blogueras organizado por Madresfera y
Yo Dona el 8 de junio de este presente año. Sé que ni siquiera soy
original en la manera de comenzar esta entrada, pero bueno, es que
tampoco había mucho donde rascar y yo necesitaba expresar mis
disculpas por tratar un tema quizá tan manido últimamente, poco
novedoso. Pero es que este evento me ha hecho reflexionar. ¿Y por
qué?
Básicamente decidí ir a este evento
porque gracias a este mundo blogueril en el que me muevo desde
hace solo 3 meses, he conocido a gente que, sinceramente, me ha caído
muy bien y creo que son personas que merecen la pena conocer en
persona si se da la oportunidad. Aún a riesgo de romper el encanto
que tiene esto del mundo virtual por el mero hecho de ser eso, algo irreal. Pero salvo por esto -algo que me parece muy importante,
por lo menos para mí-, siento que no pinto demasiado allí. En
principio es un encuentro para madres y padres (creo) blogueros (aunque en
el cartel diga encuentro de madres blogueras), y aunque yo no me
considero tal, sino una simple mortal que siente la necesidad de poner
por escrito lo que pasa por su cabecita (para mí el sentirse
bloguero implica algunas condiciones más, aunque no sé
muy bien cómo explicarlo....), parece este evento el ambiente
adecuado para este animalito.
Pero cuando veo cómo lo está
enfocando mucha gente, tanta preparación, incluso tarjetas de
visitas, la relación con las marcas (por cierto, una reflexión muy interesante a este respecto la hizo hace poco el papá de los dos monstruitos)... pienso que no es mi lugar
(quizá sean estas cosas las que, si me sintiese bloguera de verdad,
me motivarían como al resto). Y ¡ojo!, que no critico que algunas
personas se lo tomen así, ¡ni mucho menos! Solo digo que a mí no
me sale de esta manera. Aspiro a ir cómoda, con mi timidez por
delante (capaz soy de volver a casa sin haber hablado con nadie), y
charlar con esas nuevas personas que me han calado en las redes
sociales. No busco nada más profundo. Quizá alguna charla me aporte
algo, ojalá Pero no aspiro nada más que a pasar un día agradable.
El día se acerca y bueno... espero
poder sentirme finalmente cómoda...