Hoy os traigo un nuevo chocolate. Se nota que en casa nos gusta mucho, ¿eh?
Su nombre es Plamil. Se trata de una marca británica que tiene gran variedad de chocolates, entre ellos varios que están libres de leche. En Madrid yo lo compro en el Hipercor y no he encontrado variedad, sino que solo he visto el que os muestro a continuación. Pero habrá que seguir investigando.
Es más amargo que el Moo Free que ya os presenté, así que no me gusta para tomar en bocadillo, por ejemplo, que me gusta un pelín más dulce, pero es fantástico para hacer postres, fundido para coberturas, o para echar virutas o pepitas a bollos, bizcochos y postres.
El que yo he comprado tiene el etiquetado en español, pero si lo encontráis en inglés o queréis comprarlo por internet, tenéis que coger aquel en cuya etiqueta ponga dairy free, que quiere decir que no contiene lácteos.